Personas privadas de libertad con situaciones delicadas de salud (abril de 2025)

Durante el mes de abril, el CDPC documentó múltiples casos de personas privadas de libertad con afectaciones de salud que iban desde condiciones moderadas hasta cuadros clínicos graves, sin que recibieran la atención médica adecuada. En la mayoría de los casos, las necesidades de tratamiento fueron ignoradas a pesar de los reiterados reclamos de las familias o de las propias personas reclusas. A continuación, se detallan algunos de los casos más relevantes:
Ariel Eugenio Arzuaga Peña (Prisión Provincial de Granma): El día 22 se supo que no recibe atención médica para las diferentes enfermedades que padece de la presión arterial, prostatitis, una hernia discal en las vértebras L5 y F1. El preso político afirma que “lo están enterrando” e hizo un llamado urgente por su vida.
Carlos Alberto Macdonald Ennis (Prisión Provincial de Las Tunas): El día 23 se le dio seguimiento a su delicado estado de salud y se confirmó que su situación era crítica. Su caso ya ha sido reportado en meses anteriores debido a sus múltiples padecimientos: hipertensión arterial, diabetes, pancreatitis y un tumor maligno facial. No recibe los medicamentos que necesita.
Dayron Martín Rodríguez (Combinado del Este, La Habana): A finales de mes su salud continuaba deteriorándose debido a la falta de atención médica. Presenta un fuerte dolor de muelas y está perdiendo la visión. Solicitó ser llevado a graduarse la vista, pero le respondieron que no había personal disponible para atenderlo.
Dixan Gaínza Moré (Prisión Kilo 8, Camagüey): Su familia denunció que está padeciendo arritmia y picos de presión arterial, sin que reciba atención médica ni medicamentos. Su hermana llamó al penal para solicitar asistencia médica y permiso para entregarle medicamentos, pero en respuesta él fue interrogado por tres oficiales de la Seguridad del Estado, quienes lo amenazaron con aumentarle dos años a su condena como represalia por sus denuncias.
Edilberto Ronal Arzuaga Alcalá (Prisión Kilo 8, Camagüey): Durante la huelga de hambre que realizó, fue trasladado al hospital de la prisión, donde se encuentran al menos una decena de prisioneros con tuberculosis. Tras deponer la huelga de hambre, quedó con un fuerte dolor en un costado del estómago, sin recibir atención médica ni medicamentos.
Eloyki Matos (Prisión Provincial de Guantánamo): Padece miocardiopatía dilatada y cardiopatía isquémica. Requiere una prueba de cateterismo en Santiago de Cuba para la colocación de un stent y un marcapasos, pero las autoridades se niegan a trasladarlo. El día 8 se visibilizó que, según la doctora del penal, su vida corre peligro si no le realizan el procedimiento. Su estado ha empeorado: no puede subir ni bajar escaleras, presenta hinchazón en una pierna y no recibe la medicación requerida.
Fernando Michel Bárzaga Mompié (Prisión Provincial de Granma): A finales del mes se supo que tiene gran parte del cuerpo afectado por dermatitis y la artrosis avanzada prácticamente no le permite caminar.
Jaime Alcides Firdó Rodríguez (Prisión 1580, La Habana): De acuerdo con una denuncia del día 24, su estado de salud es crítico. Padece hipertensión arterial y hemorroides, sin acceso a tratamiento. Ha perdido considerable peso desde su encarcelamiento, a inicios del mes. En lugar de recibir atención médica, fue aislado en una celda de castigo.
Loreto Hernández García (Prisión de Guamajal, Villa Clara): El 4 de abril tuvo que ser llevado al puesto médico de la prisión con fuertes dolores en el pecho, crisis de hipertensión y taquicardia. En una llamada telefónica posterior le dijo a su esposa que estaba vomitando sangre.
Onaikel Infante Abreu (Combinado del Este, La Habana): A mediados de mes se conoció que fue diagnosticado con cáncer de garganta. No se ha informado que esté recibiendo el tratamiento adecuado para esta enfermedad.
Yadir Ayala Ibáñez (Prisión Kilo 7, Camagüey): La prisión no le permite recibir carbamazepina de su familia, medicamento que las autoridades no le garantizan. Sufre fuertes dolores de cabeza.
Yaquelín García Jaén (Prisión Provincial de Mujeres, Granma): El día 9, pasó la noche vomitando sin que hubiera medicamentos disponibles para tratarla.
Yasmany González Valdés (Combinado del Este, La Habana): A finales de mes, a través de una carta pública, se supo que ha perdido 20 kilogramos de peso debido a la mala alimentación. También ha perdido sus piezas dentales sin que le brinden atención estomatológica. Su aspecto ha cambiado notablemente, mostrando signos de envejecimiento acelerado.
Yosvany Rosell García Caso (Prisión Cuba Sí, Holguín): El día 24 su esposa denunció que se encontraba descompensado por hipertensión arterial y no estaba recibiendo la medicación cardíaca que requiere.